Los trabajos, que han sido financiados íntegramente por el Gobierno de Cantabria, han tenido un coste total de 1.270.500 euros
Mazón ha explicado que "se trata de una carretera que necesitaba de una renovación debido al deterioro ocasionado por las máquinas quitanieves a lo largo de la temporada invernal, junto con las tensiones causadas por la diferencias de temperatura". El consejero ha felicitado a la empresa constructora Senor por el trabajo desarrollado en un tiempo récord, interfiriendo muy poco en la vida local, a pesar de la técnica utilizada con la finalidad de evitar las posibles fisuras posteriores.
Por su parte, los alcaldes de Campoo de Enmedio y de la Hermandad de Campoo de Suso, Pedro Manuel Martínez y Pedro Luis Gutiérrez, respectivamente, han agradecido esta actuación a la Consejería, desarrollada en una carretera muy importante para la zona, por su incidencia turística y su localización en unos municipios de montaña. También han estado presentes en la visita el director general de Obras Públicas, José Luis Gochicoa, junto con técnicos de la Consejería y concejales de ambos ayuntamientos.
Características
Estos trabajos, que sido financiados íntegramente por el Gobierno de Cantabria con un importe total de 1.270.500 euros, han consistido en el extendido de una nueva capa de rodadura en el firme, a lo largo de 10.200 metros, además de la instalación de diferentes elementos de señalización vertical y el pintado de marcas viales. El ancho de la nueva vía es de 8,25 metros.
Concretamente, las obras han incluido la reparación de las partes degradadas del anterior firme, junto con el añadido de una nueva capa de mezcla bituminosa en caliente de seis centímetros de espesor en la totalidad de la carretera Nestares-Villar.
Para ello, se ha utilizado un betún modificado, que cuenta con unas características especiales en cuanto a adhesividad y durabilidad que se hacían necesarias para las condiciones de tráfico del tramo, especialmente en una zona muy afectada por la climatología invernal.