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Movilidad choca con el transporte de viajeros discrecional de Madrid

martes 17 de diciembre de 2019, 07:00h
Movilidad choca con el transporte de viajeros discrecional de Madrid
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El 20 de noviembre el Coordinador de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid publicó la Resolución por la que se establecen medidas de restricción del tráfico en la calle Gran Vía

En las distintas reuniones mantenidas a todos los niveles de representación con los responsables y actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Madrid (Área de Gobierno de Medioambiente y Movilidad, coordinador general de Medio Ambiente, coordinador general de Movilidad, Área de Gobierno de Portavoz, Seguridad y Emergencias, Coordinador General de Seguridad y Emergencias) se aseguró a los representantes del Comité Madrileño de Transportes por Carretera, de AETRAM y de la Asociación de Agencias de Viaje de Madrid AEMAV, que durante el periodo de navidad no se prohibiría la entrada a Gran Vía de los autocares dedicados al transporte discrecional de viajeros.

Los representantes del Sector así lo trasladaron a las empresas, los que, con esta previsión, asumieron lo que consideran un derecho: poder circular transportando escolares, trabajadores, turistas y grupos de viajeros, cuando fuera necesario, por razón de los servicios contratados por la calle Gran Vía.

Con fecha 20 de noviembre el Coordinador de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid ha publicado la Resolución por la que se establecen medidas de restricción del tráfico en la calle Gran Vía a vehículos de más de 3.500 kilogramos de MMA destinados bien para el transporte de mercancías, bien para el de personas, desde el 22 de noviembre de 2019 al 6 de enero de 2020.

Según declara, "consecuencia de la exclusión de los autocares discrecionales, del Derecho de acceso a la calle Gran Vía, el resultado es de incredulidad por parte de los empresarios transportistas y agencias de viaje, que han sufrido en sus carnes el cambio de criterio del Ayuntamiento de Madrid, no solo respecto de la posición anterior del Consistorio, de oposición a esta medida, sino de perplejidad por cuanto que en las diversas reuniones referidas con los representantes de movilidad, se ha transmitido, sin ningún género de dudas, que no se iba a dictar resolución semejante".

El mes de diciembre es un mes de temporada alta para el sector, dada la afluencia de visitantes a la capital, por lo que es Madrid el objeto de las visitas. Madrid es a Gran Vía, como Gran Vía es a Madrid: cuerpo y alma.

Las agencias de viajes solicitan a las empresas, desde finales de noviembre, requerimientos de servicios como Visita a la ciudad de Madrid, traslados aeropuerto-hotel, muchos de los cuales se encuentran en las inmediaciones de Gran Vía, servicios de visita a Gran Vía y luces de Navidad, o traslados a restaurantes, teatros etc., teniendo necesidad de acceder a dicha arteria tanto para trasladar a escolares como a trabajadores, como a turistas, como a grupos homogéneos de ciudadanos que precisan este modo de transporte, sin el cual no es posible alcanzar la movilidad sostenible.

El perjuicio que se ocasiona a este tejido industrial, al impedir el acceso de los autocares a Gran Vía, en estas fechas, es incalculable por cuanto que la anulación de servicios crea una grave pérdida en la cuenta de resultados de las empresas.

Afirman que "lo peor es observar como los clientes de los empresarios derivan a los viajeros a los autocares que están exceptuados de la aplicación de la disposición, es decir los propios de la EMT, de los autocares turísticos de concesión municipal y de transporte urbano para contemplar la iluminación, organizado por el Ayuntamiento de Madrid, servicio, este último otorgado a dedo, sin mediar concurso público a la empresa ALSA".