Marcos Basante, su presidente, se refiere a las medidas propuestas por la Federación Europea de Trabajadores del Transporte, que "se enmarcan dentro de una campaña para sensibilizar a la opinión pública europea en contra de lo que se ha denominado dumping social y que pone un foco en las condiciones en que realizan los descansos semanales los conductores profesionales, lejos de sus bases".
Astic considera que "más allá de un enfoque de carácter represivo, la situación podría corregirse de forma más eficiente con la eliminación de alguna rigideces presentes en la actual reglamentación de la Unión Europea, que impide a los conductores realizar los descansos semanales en su propio lugar de origen". Por eso impulsan propuestas concretas que no implican un incremento en la conducción ni una reducción en los descansos, pero que buscan evitar que los descansos se realicen a lo largo de los recorridos. Para Astic, ésto "favorecería a las empresas que realizan tráficos bilaterales (ida y vuelta al país de origen) sobre las que operan en un ámbito europeo con absoluta desconexión con el lugar de origen, cuyos conductores permanecen durante meses realizando los descansos semanales en la carretera".
Por todo ello, Astic cree que "el enfoque represivo de las propuestas de la ETF, junto a las medidas proteccionistas de Francia, Alemania, Austria y Bélgica, no sólo no combate la deslocalización ventajista ni el dumping social, sino que termina fomentándolos". Y destaca que "medidas de flexibilización dirigidas a facilitar la vuelta a casa de los conductores, tendrían una mayor eficacia".