Mercedes-Benz ha dado un nuevo paso en su estrategia de movilidad sostenible al anunciar la entrega de casi 5.000 furgonetas eléctricas eSprinter y eVito a los socios de reparto de Amazon. Esta ampliación refuerza la ya sólida colaboración entre ambas compañías, que cuentan con más de 1.800 vehículos eléctricos Mercedes en circulación para operaciones logísticas de última milla.
eSprinter y eVito, listas para el reto del reparto eléctrico
El grueso de la flota —alrededor del 75%— estará compuesto por furgonetas grandes eSprinter, fabricadas en la planta de Mercedes-Benz en Düsseldorf. Estas unidades estarán disponibles en dos longitudes distintas y ofrecerán tres opciones de batería, con autonomías de hasta 484 kilómetros según el ciclo WLTP. Todas han sido adaptadas con estanterías personalizadas para paquetes y una separación con puerta deslizante que conecta con la cabina del conductor, optimizando así la eficiencia en las rutas.
El 25% restante del pedido corresponde a furgonetas medianas eVito, producidas en la planta de Vitoria, España. Pensadas para entornos urbanos, estas unidades ofrecen baterías de 60 o 90 kWh y una autonomía de hasta 480 km, consolidándose como una opción ideal para el reparto de última milla en ciudades.
Compromiso con la descarbonización de la logística
Sagree Sardien, directora de ventas y marketing de Mercedes-Benz Vans, destacó que este paso “intensifica nuestra relación con Amazon” y demuestra que la electromovilidad “puede combinar autonomía, confort, eficiencia y cero emisiones locales” sin renunciar al rendimiento.
Por su parte, Neil Emery, Director de Flota y Producto Global de Amazon, subrayó el compromiso del gigante del comercio electrónico con la descarbonización: “Desde bicicletas eléctricas hasta furgonetas y camiones, estamos transformando nuestra red de transporte. Esta nueva flota es un paso más hacia una logística más limpia y eficiente en Europa”.
Este despliegue de furgonetas eléctricas no solo marca un avance significativo hacia un transporte libre de emisiones, sino que también refuerza el papel de las alianzas estratégicas entre fabricantes y grandes operadores logísticos como palanca clave para acelerar la transición ecológica en la movilidad urbana y regional.