Los 2.500 autobuses que ya no tendrán que circular por las inmediaciones de la estación de Príncipe Pío y la cuesta de San Vicente supondrán, "para los 250.000 ciudadanos que hacen uso a diario de estas instalaciones, un ahorro de tiempo de 45.000 horas anuales y disminuirá la contaminación y los ruidos", indicó el consejero de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Manuel Lamela, durante su visita del pasado sábado a las instalaciones.
En dicho evento, el consejero tuvo la oportunidad de conocer de primera mano el estado de las obras que han solucionado la aparición de restos arqueológicos durante la excavación. Ahora, la conexión entre elintercambiador y la A-5 está libre para el paso de autobuses y autocares, que conectan la capital con la población de la zona Sur de la región, una de las populosas de los alrededores de la capital.
210.000 usuarios
Según datos oficiales, el nuevo intercambiador beneficiará directamente a más de 210.000 usuarios de Metro, autobuses urbanos, interurbanos y de Cercanías, facilitando el intercambio entre las líneas 6 y 10 de Metro, el ramal Ópera- Príncipe Pío, las líneas C-7 y C-10 de Cercanías Renfe, ocho líneas de autobuses urbanas y 13 interurbanas. Del mismo modo, la flota de La Sepulvedana, que realiza el trayecto Madrid-Segovia, han anunciado su inminente traslado desde su base en el Paseo de la Florida al intercambiador.