Esta iniciativa comporta una variación mínima en la temperatura del líquido refrigerante utilizado en las instalaciones de aire acondicionado de las oficinas de Iveco en toda Europa. Un pequeño sacrificio que comporta un aumento de 1°C en la temperatura durante el periodo estival, manteniendo la temperatura sin embargo en niveles considerados óptimos para la salud y el confort.
En realidad, esta pequeña modificación tiene un gran impacto a nivel ambiental, pues de acuerdo con una estimación efectuada en 14 centros de trabajo, se obtendría un ahorro energético que permitiría evitar la liberación de 423 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Igualmente, la campaña ‘Ivec-O2’ proporciona a los empleados, a través del portal de la empresa, un vademécum de comportamientos y pequeñas acciones cotidianas orientadas a evitar derroches inútiles en la oficina, fomentando comportamientos de involucración activa y responsable de las personas que trabajan en Iveco.