En este encuentro, celebrado a fines de octubre en Valencia, representantes de UPS, ISTA —organización internacional especializada en los aspectos específicos del embalaje de distribución—, Itene, Sealed Air, ASDA, Reckitt Benckiser, Stress Engineering, Lansmont, Pira International, SCA, Kaho Sint-Lieven, Solán de Cabras, Victoria University, TTI, SRB Energy y WRAP, presentaron casos de estudio de las últimas técnicas, ideas y avances sobre el embalaje de transporte y la distribución física de productos.
El entorno al que un producto debe sobrevivir desde que es fabricado hasta que llega al cliente final (etapa de distribución) puede resultar muy severo. El sistema producto–embalaje deberá ser capaz de soportar, sin sufrir excesivos daños, compresiones, vibraciones, humedad, electricidad estática, calor, frío, cambios de presión, impactos por caídas, inestabilidad, infestación etc. Por ello, el sistema de embalaje diseñado debe estar desarrollado específicamente para su contenido y haber superado satisfactoriamente toda una serie de pruebas en la que se simulen las distintas solicitudes ambientales a las que estará expuesto a lo largo de su ciclo de distribución (choques, vibraciones, caídas,...) para obtener su optimización final, lo que se conoce como ensayos de simulación del transporte.
Casos prácticos
El congreso recogió numerosas ponencias teóricas y presentaciones de casos reales, que abordaron aspectos claves como la huella de carbono en los envases y embalajes, modelos de análisis del valor del embalaje, costes, pautas para conseguir sistemas de envases y embalaje de éxito o nuevas herramientas y materiales.
Juan Alcaraz, jefe de Proyectos de Itene, y Simon Dent, responsable de Exposiciones de TTI, ofrecieron la ponencia ‘Reducción de riesgos bajo condiciones climáticas extremas, impactos y vibraciones’, en la que se mostró el caso práctico realizado por Itene para la empresa TTI.
El caso práctico puso en evidencia el desarrollo de un nuevo envase denominado Ulises, patentado para cuadros muy delicados, que ha sido desarrollado utilizando componentes pasivos que protejan el producto en condiciones extremas de temperatura y humedad, y aplicando principios de la ingeniería. Este innovador embalaje soluciona todos los problemas planteados en el proceso de transporte y conservación de las obras de arte hasta unos límites no conocidos hasta ahora. Por ejemplo, es capaz de mantener un rango óptimo de temperatura durante más de 43 horas, evitar daños por agua y fuego, proteger a la obra de arte frente a golpes y caídas y adaptarse dimensionalmente a distintos tamaños de las obras.
Manuel Garcia-Romeu, responsable del Departamento de Soluciones Integrales, y José Luis Gimeno, responsable de Diseño de SRB Energy, ofrecieron el segundo caso práctico a través de la ponencia ‘Soluciones de Embalaje mejoradas para el Colector Termosolar al Ultra-Alto Vacío de SRB’, empresa que desarrolla su actividad en el campo de las energías renovables. La acción mostró el proceso completo de desarrollo del sistema de embalaje, desde el análisis del producto (análisis de fragilidad y transmisibilidad), el diseño de caja y el diseño del amortiguador, la validación en el laboratorio (la prueba de humedad, prueba de impacto horizontal) y pruebas de campo (simulación del transporte monitorizado a través de un sensor de vibraciones y choques).