Las ventas de vehículos electrificados (eléctricos e híbridos enchufables, comprendiendo turismos, cuadriciclos, vehículos comerciales e industriales y autobuses) cierran el año con un total de 84.645 ventas, un aumento del 19,1% respecto al año anterior. Este es el dato facilitado por Anfac, organización que considera que, a pesar de esta mejora anual, el mercado de electrificados sigue representando un volumen apenas representativo respecto al mercado general, con el 8,8% de la cuota total. En cuanto a las matriculaciones de vehículos de cero y bajas emisiones (electrificados, híbridos y de gas), aumentan un 10,2% en el año, con 344.824 unidades vendidas. Este tipo de vehículos se sitúa, junto con los de gasolina, como primera opción de compra para los usuarios, con el 35,84% del mercado total. José López-Tafall, director general de Anfac, afirma que “las ventas de vehículos electrificados continúan al alza. Comparativamente con el año anterior, el mercado crece, pero el ritmo de penetración es extremadamente lento. En el último mes se logra una cuota cercana al 10% sobre las ventas totales, cuando los electrificados tendrían que haber cerrado el año por encima del 14% de cuota para cumplir con los objetivos de descarbonización marcados por el Gobierno. A este ritmo, España no va a cumplir sus objetivos de descarbonización, con el problema añadido de que estamos lejos de la media europea y en el furgón de cola de la Europa de las dos velocidades de electrificación que se está creando. Cierto es que ha habido problemas de suministro de piezas y en la cadena logística para entregar más vehículos nuevos. Pero nuestros países vecinos y miembros de la UE también tienen los mismos problemas de chips y transporte y tienen cuotas de vehículo electrificado por encima del 20%, como es el caso de Portugal, o del 26%, como ocurre en Alemania. Necesitamos medidas urgentes para 2023, 2024 y 2025 que incentiven la compra de estos vehículos para no poner en peligro inversiones y empleo en un sector clave en la economía española”. En este sentido, el director general recuerda que “Anfac ha presentado numerosas iniciativas copiando lo que hacen otros países de la UE donde sí se están vendiendo más electrificados y el Gobierno español las ha desestimado. Los fabricantes cumplimos con los objetivos de descarbonización, pero necesitamos que la colaboración público-privada sea práctica por ambas partes y no sólo teórica por ambas partes”. Ganvam y Aedive Por su parte, otras entidades, como Ganvam y Aedive, también han publicado sus datos, que sitúan las matriculaciones de vehículos electrificados (100% eléctricos + híbridos enchufables) de todo tipo (turismos, dos ruedas, comerciales e industriales) creciendo un 20,9% en 2022, hasta alcanzar las 100.425 unidades. Si bien por primera vez se cumple el hito de superar la barrera de las 100.000 unidades, “ambas entidades estiman que las matriculaciones de vehículos electrificados crecen a un ritmo insuficiente para cumplir con la senda de descarbonización, teniendo en cuenta que los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima-PNIEC fijan para el horizonte 2030 un total de cinco millones de modelos de este tipo en circulación frente a los cerca de 325.000 actuales”. Las furgonetas eléctricas, cada vez más presentes en el reparto de última milla, cerraron 2022 con una subida del 32,8%, hasta las 3.785 unidades. Los camiones eléctricos medios cierran con ocho unidades matriculadas (sin comparativa con el año anterior) y los pesados alcanzan la cifra de 86, que suponen un crecimiento respecto al año precedente del +681,8%.