Los hechos se remontan a las incidencias registradas en las últimas semanas en algunas estaciones de servicio de las cuatro provincias gallegas, hasta donde han llegado numerosas reclamaciones de conductores de automóviles y camiones por haberse producido averías en sus vehículos tras repostar.
Según informa La Voz de Galicia, y a la espera de la confirmación oficial del acuerdo, las gasolineras afectadas se encargarán de recoger los originales de las facturas de los talleres y las entregarán, junto con las facturas del combustible, a las petroleras, que serán las encargadas de hacérselas llegar a la distribuidora. Las inicdencias tienen especial relevancia en el caso de los camiones, dado que sus depósitos de combustible son de 500 y de 1.000 litros. La previsión por parte de las gasolineras es de que la distribuidora reintegre el dinero de las facturas en el plazo de tres o cuatro semanas.
Tanto CLH como Repsol -primer accionista de la distribuidora- sostienen por el momento que el producto que sirven en Galicia cumple con todas las especificaciones de calidad previstas en la normativa, y que siguen investigando "en qué punto de la cadena" se ha producido el fallo que ha originado las averías en turismos y camiones. "Parece que los fallos han coincidido siempre con una bajada de las temperaturas y con unos filtros de motor determinados", ha señalado un portavoz de CLH.