Esta reducción de tamaño tiene sus mayores ventajas en los equipos de climatización para automóviles, ya que afecta sobre todo, al espesor de los intercambiadores de calor, que en los coches están colocados delante del radiador del vehículo donde no hay mucho espacio, y no tanto a su superficie frontal, ya que ésta tiene que ser la adecuada para garantizar que el caudal de aire que atraviesa la batería lo haga con la velocidad necesaria. Debido a esto, la mejor relación entre capacidad de intercambio térmico y tamaño de las baterías de flujo paralelo no afecta de una forma importante a los equipos de climatización para autocares y autobuses.
Fabricados en aluminio
Otra de las ventajas de estos intercambiadores es que están fabricados íntegramente en aluminio lo cual reduce su peso y los hace reciclables al 100%, en línea con lo que proponen algunas normativas europeas. Durante los últimos meses se han diseñado y desarrollado, conjuntamente con una prestigiosa multinacional, los intercambiadores de flujo paralelo que utilizarán los equipos de Hispacold, lo que asegura unos niveles de calidad y suministro óptimos. Hispacold ha trabajado en incorporar estos componentes a sus equipos y ofrece a los clientes que lo deseen, un estudio particularizado de sus necesidades y posibilidades de instalación.