Un proceso integral estratégico ha derivado en esta decisión, que incluye actualizar el logo con “un diseño más moderno, dinámico y vibrante, con un enfoque en las fortalezas y factores diferenciadores centrales de Castrol. La intención de la compañía es ampliar su atractivo a una base de clientes más diversa ofreciendo lubricantes, servicios y soluciones”, aunque mantiene sus tradicionales colores rojo, verde y blanco.
El proceso de introducción del cambio se realizará de forma paulatina hasta 2024
“Castrol se encuentra a la búsqueda de oportunidades que faciliten soluciones y servicios complementarios a su negocio principal de lubricantes”, destacando Castrol ON, una gama de fluidos avanzados para vehículos eléctricos (VE) que incluyen líquidos de transmisiones, térmicos y grasas para VE. “Creo que renovar una marca reconocida a nivel mundial no es sólo cambiar su apariencia o su mensaje”, apunta Michelle Jou, directora ejecutiva de Castrol. “Hay que revitalizar su esencia y relevancia en el mundo actual. Tenemos que escuchar a nuestros clientes, comprender sus necesidades y aspiraciones en constante evolución, y aprovechar nuestras fortalezas principales para convertirnos en una marca que les sirva de inspiración. Una marca renovada no debe limitarse a ser un ejercicio cosmético; en mi opinión, se trata de un imperativo estratégico que impulse el crecimiento, la diferenciación y el éxito a largo plazo”.
Sonido incluido
Esta puesta al día de la marca también lleva consigo una nueva identidad sonora “para mejorar la apariencia visual y las sensaciones, con una música y un diseño de sonido que provocan sensaciones de aceleración, impulso hacia adelante y movimiento dinámico”, afirman desde la marca.