La propuesta incluye la realización de inspecciones masivas a fin de garantizar el cumplimiento de los derechos laborales de los trabajadores, así como asegurar la competencia justa y la sostenibilidad del mismo en un contexto de desafíos crecientes, como las exigencias medioambientales, fiscales y de costos energéticos.
Se busca garantizar los derechos laborales
En concreto, los de Díaz destacan la necesidad de "realizar una auditoría de la situación laboral de las transportistas y otras personas trabajadoras del sector en carretera a través de las Inspección de Trabajo". Esta tiene como objetivo "garantizar los derechos laborales de sus trabajadores, asegurar la continuidad del Sector ante sus dificultades de reclutamiento y comprobar que la competencia se rige con el debido respeto a la ley evitando todo dumping social".
El partido señala que algunos trabajadores realizan jornadas de 15 horas diarias
En la proposición, Sumar incide en que "la búsqueda de eficiencia ha sobrepasado en varios casos los límites del fraude laboral", haciéndose eco del caso de profesionales que "relatan que el trabajo de hasta 15 horas laborales diarias no es una anomalía en el Sector". Incluso, añade que "determinados empresarios remuneran el trabajo por kilómetro en lugar de por horas trabajadas excluyendo, en consecuencia, las horas de espera durante la estiba de los vehículos o las necesarias pausas en la conducción".
A los fraudes horarios denunciados se suma la dureza de la profesión, que comprende otro tipo de abusos. Tal y como recuerda el partido, algunos profesionales se ven forzados a realizar tareas fuera de su contrato y para las que en ocasiones no están preparados, como la carga y descarga de sus vehículos. La dureza de las condiciones y la exigencia física de las tareas, sin olvidar el estrés mental de la atención que requiere estar muchas horas al volante, se manifiesta en la salud de muchos transportistas, haciendo habituales las enfermedades del sistema musculoesquelético como la artrosis, la lumbalgia y diversos dolores crónicos, así como problemas de obesidad, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares, depresión, ansiedad y estrés.
Sumar destaca también que el fraude laboral tiene un impacto directo no solo en sus trabajadores, sino también en las arcas de la Seguridad Social y en el de la Hacienda Pública. Por ello, considera necesario investigar las condiciones laborales de los transportistas, conductores de autobús y otros trabajadoeas de servicio en carretera, tratanado así de evitar cualquier competencia desleal dentro del mercado y que se trabaje en condiciones penosas.
Combatiendo la falta de trabajadores
En la proposición se hace referencia también a la escasez de conductores a la que se enfrenta el Sector, que no solo está falto de profesionales sino que, dada la avanzada edad media de sus trabajadores, amenaza con ver agravada esta situación en los próximos años. Recuerdan que "el transporte presenta dificultades para el reclutamiento de nuevos trabajadores tanto asalariados como autónomos", considerando que "posibles incumplimientos de la normativa por parte de algunos empleadores podrían darnos una explicación clara de las dificultades que enfrentan para la contratación de nuevos profesionales".