Los expertos coincidieron en que estamos asistiendo a un cambio de paradigma en el comercio internacional
La jornada incluyó una mesa redonda moderada por Jordi Fornós, director de consultoría y proyectos internacionales de Cimalsa, y contó con la participación de Elena Antonijuan, manager de servicios a la internacionalización en Acció; Jordi Bort, director general de Llopart; Antonio de la Ossa, socio y director de la división de comercio exterior de Avincla; y Enric Ticó, presidente de Feteia.
Durante la sesión, los expertos coincidieron en que estamos asistiendo a un cambio de paradigma en el comercio internacional, donde el multilateralismo clásico está siendo reemplazado por políticas comerciales más transaccionales. En este contexto, Elena Antonijuan explicó que, si bien el impacto directo de los aranceles representa un 4% del PIB catalán, la afectación indirecta es mucho mayor debido a la repercusión sobre las cadenas globales y las exportaciones intermedias redistribuidas desde otros países europeos. Señaló además que los sectores más vulnerables en Cataluña son el farmacéutico, el metalúrgico y el de maquinaria.
Por su parte, Antonio de la Ossa advirtió que no se debe subestimar el impacto de las políticas arancelarias estadounidenses: “Estados Unidos tiene capacidad para romper esquemas y posiblemente esta política no será tan efímera como en la anterior legislatura de Trump”. En ese sentido, apuntó a la necesidad de reforzar la eficiencia del sistema aduanero, ante la posibilidad de que resurjan prácticas de fraude.
Enric Ticó, presidente de Feteia, expresó su confianza en la revisión del código aduanero de la Unión Europea y en la eventual creación de una aduana unificada, lo cual permitiría mayor eficiencia y transparencia. Subrayó además el papel clave de los transitarios, ya que “más del 90% del transporte de mercancías pasa por ellos y, en tiempos inciertos, su relevancia aumenta”.
Desde el punto de vista de la industria productora, Jordi Bort expuso la experiencia de Llopart, explicando que, frente al encarecimiento de los costes por aranceles, optaron por absorber parcialmente ese incremento para mantener la regularidad de los pedidos con un cliente con el que mantienen una relación comercial desde hace más de 30 años. Defendió la necesidad de tomar decisiones con visión a largo plazo, sin dejarse llevar por el nerviosismo.
Gestión de los polígonos de actividad económica
Paralelamente, en el Ágora de Cimalsa se celebró la sesión titulada “Los indicadores en la gestión y planificación de los polígonos”, con la participación de Lourdes Sugranyes, coordinadora de políticas de desarrollo económico del Ayuntamiento de El Prat de Llobregat; Martí Puig, CEO de Cisternas del Vallès; y Fina Jarque, directora corporativa de Cimalsa.
Durante el debate se puso en valor la función de los polígonos como centros de trabajo y se destacó la importancia de que sean espacios agradables y funcionales. Martí Puig insistió en que la colaboración entre el sector público y privado es esencial para impulsar proyectos que mejoren estos entornos. En esa línea, Sugranyes recordó que las administraciones deben asumir su responsabilidad en la gestión y dinamización de los polígonos industriales, entendiendo que su buen funcionamiento incide directamente en el tejido empresarial del territorio.