Las ayudas directas, según el acuerdo alcanzado por las patronales del sector de la automoción, deberían alcanzar los 1.200 euros para turismos y vehículos comerciales ligeros, 3.000 euros para los vehículos industriales de entre 3,5 y 16 toneladas, y los 12.000 euros para los vehículos de masa superior a las 16 toneladas. En cuanto a la financiación de la venta de vehículos, es necesaria una inyección adicional de crédito para facilitar la adquisición de vehículos por parte de particulares y empresas, así como que este crédito, al que deben tener acceso directo todas las entidades de crédito, se destine de forma exclusiva a la automoción.
Marcos Montero, presidente de la CETM, ha destacado "la urgencia de poner en marcha esta serie de medidas para aumentar las ventas y sus efectos beneficiosos, como son la renovación de la flota –que supone un aumento de la seguridad y una reducción de la contaminación, al ser vehículos nuevos y más ecológicos- y el aumento de la actividad, lo que repercute de forma directa en el mantenimiento del empleo y en la reactivación de la economía".