"Esto es inusual en una ciudad de 180.000 habitantes", explicó Cobo. "El promedio está en los 70 viajes por habitantes. Ahora, cuando estás a la cabeza o en el límite más alto, es muy difícil subir viajeros. Segundo, cómo se ha ido comportando: En realidad, en el 2007 llegamos a los 20 millones. Y bajamos a 19 millones y medio".
- Se podría decir no es un tema de disminución de los usuarios de transporte público, sino directamente los desplazamientos...
- Las horas punta se mantienen. El ocio ha sido el que ha pegado un bajón, y como tal nos ha afectado. Pero dentro de cifras que realmente para nosotros no son muy significativas, porque estamos hablando de un 2%. Lo digo porque en el resto de España sé que están hablando de un 8, 10, 15%. Ahora, ha habido una faceta importante, y es que al haberse reducido el uso del coche privado ha mejorado la circulación. Qué significa: Mejor velocidad comercial, mejor cumplimiento de horarios, mejor calidad del transporte urbano. Por eso absorbe, por decirlo así, ese posible bajón dentro de lo que ha sido el ocio. El ocio ha bajado más, en cuanto a pernoctaciones y consumo, que lo que ha bajado la demanda interna del transporte urbano.
- Háblenos de la tarjeta sin contacto: grado de implantación y cómo se está dando la sustitución de los abonos.
- Nosotros fuimos pioneros. En el año 96 pusimos la tarjeta con contacto. Por lo tanto ya somos muy duchos en la materia. Y hace un par de años hemos implantado un nuevo sistema de ayuda a la explotación integral, en cuanto lo vamos a integrar en todo. Esto, por decir así, es el último grito en SAE. Posiblemente seamos la primera ciudad de España que tenga ese tipo de SAE, un sistema en el que se integra todo dentro del mismo software: sistema de cobranza, letreros, averías, localización de autobuses, gestión de autobuses, información de paradas, etc.. Eso significa una sola base de datos. Y el 1 de julio hemos arrancando con la tarjeta sin contacto. Lo más importante es que está integrada con el SAE. Un conductor se sube a un autobús y le dice que línea tiene que hacer, qué sistema, cuándo tiene que parar, cuando tiene que arrancar… Además le pone los letreros automáticamente. La máquina de cobranza se enciende automáticamente y le dice lo que tiene que hacer. Carga todos los títulos, le dice las paradas, todo. O sea todo se ha simplificado.
- ¿Cómo llega esa información al usuario?
- Tenemos, en 60 paradas, 60 paneles. Informan, en tiempo real, sobre las paradas, las llegadas del autobús, las líneas, etc. Es decir, una información total. Aparte de eso tenemos la web, en la que se pueden consultar los horarios de paso, y a través de SMS.
El valor del transporte público
Para Juan José Cobo "los servicios públicos están ahí y siempre serán necesarios para la sociedad. Se van a seguir consumiendo". Lo que sí habrá, en palabras del director gerente de TUS, es "una adaptación a las nuevas circunstancias. Las crisis crean unos precedentes o cambios de hábito, a los que tenemos que adaptarnos. Una de las consecuencias de esta crisis es que la gente está pensando más en comprar por economía que por calidad, por servicio o por una serie de cosas. En transporte urbano no se valora el precio del producto. Es tan sumamente barato que nadie lo valora, se desecha el concepto de precio. Y luego está el aspecto social. Nunca el valor podemos medirlo por el valor económico. Porque si miráramos el valor económico no dábamos la mitad de las líneas, las hubiésemos quitado. Discapacitados es un coste excesivo, pero hay que hacer ese coste... Es decir, lo nuestro es un bien social, que prima sobre el beneficio económico. Por lo tanto, mientras que esté bajo el parámetro del beneficio social, lo único que tiene que hacerse es adaptarse a los cambios en las costumbres de la sociedad".
