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Barcelona invertirá unos 28.000 euros en la adaptación de 137 paradas de autobús para minusválidos

Las asociaciones de discapacitados vienen solicitando desde hace cinco años la eliminación de obstáculos en las paradas

lunes 03 de diciembre de 2007, 01:00h

En otro ámbito, la limitación de velocidad a 80 km/h, que tiene por objetivo reducir la contaminación y evitar accidentes, estará en pruebas durante todo diciembre en la Ciudad Condal, aunque no se sancionará a los conductores que superen el nuevo límite -siempre que mantengan los establecidos anteriormente- hasta el 1 de enero.

Con el relleno de los alcorques de los árboles que hay junto a 137 paradas de autobuses, Barcelona ha comenzado a atender una vieja reivindicación de los minusválidos, ya que dichos "obstáculos" dificultan el acceso  de las sillas de ruedas y ponen en peligro a quienes necesitan moverse con bastón. Algunos alcorques han sido rellenados ya con resina, caucho y piedras, materiales que permiten la circulación de aire y agua y no obstaculizan el crecimiento del árbol, según responsables municipales.

Las obras se realizarán en todos los distritos y tendrán un coste cercano a los 28.000 euros.

Tras la primera fase, el ayuntamiento extenderá las obras a todas las paradas que tengan árboles peligrosos para quienes se mueven con silla de ruedas o bastón, es decir, entre 800 y 1.000 paradas.

Limitación de velocidad

Por otra parte, la Ciudad Condal está poniendo a prueba la limitación de velocidad a 80 km/h durante todo el mes de diciembre, con el objetivo de reducir la contaminación. La medida se empezó a aplicar el 1 de diciembre, aunque,  al encontrarse en fase informativa, no se sancionará a los conductores que superen esta velocidad hasta el 1 de enero, siempre que circulen dentro de los límites establecidos hasta ahora. En Nochevieja se empezará a multar a los que superen el nuevo límite de velocidad en 12 tramos de 16 municipios de la comarca del Barcelonès y del sur y el centro del Baix Llobregat.

A lo largo del presente mes se llevará a cabo una campaña informativa en los principales periódicos catalanes, se realizarán actos de sensibilización en varias localidades y se anunciará en los paneles luminosos de las carreteras. Además, se instalarán 18 radares y controles dinámicos de velocidad.

Durante la presentación de la campaña, el director del Servei Català de Trànsit, Josep Pérez Moya, explicó que el 1 de enero de 2009 se empezará a aplicar la señalización variable de la velocidad, para adecuarla a las circunstancias de la vía en función de tres parámetros: intensidad del tráfico, niveles de contaminación y condiciones meteorológicas.