Este programa supone la sexta fase del proyecto Gemini, un convenio de colaboración para desarrollar conjuntamente motores diésel que acaba de cumplir diez años, y en que los dos socios acumulan una inversión de más de 2.000 millones de euros.
Las motores que PSA y Ford fabricarán desde 2013 se caracterizarán por la reducción del consumo y las emisiones de CO2, y se destinarán tanto a vehículos comerciales como a turismos de los dos fabricantes de automóviles.
El presidente y consejero delegado de Ford Europa, Stephen Odell, ha destacado que, juntos, ambos socios se han convertido en el primer fabricante mundial de motores diésel de alto contenido tecnológico. "Miramos al futuro y llevamos nuestra cooperación a su segunda década", ha agregado.
Por su parte, el presidente de PSA, Philippe Varin, ha declarado que al reafirmar y reforzar la colaboración, las dos empresas garantizan que cumplirán sus compromisos en materia de reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO2).