En total, las Juntas Arbitrales específicas para el sector del transporte en la Comunidad de Madrid han recibido desde enero hasta el 31 de agosto un 25% más de reclamaciones que en el mismo periodo del año anterior, 2.131 frente a las 1.693 recibidas en 2011. Entre estas reclamaciones de arbitraje se enmarcan tanto las directas, remitidas por empresas o particulares, como las externas, remitidas por otros organismos. La mediación de la Comunidad ha permitido resolver estas reclamaciones, bien a través de un laudo arbitral o bien antes de llegar a esta forma de terminación, normalmente por alcanzar las partes un acuerdo antes de la vista oral.
Para dirimir estas cuestiones, las Juntas Arbitrales celebran periódicamente sesiones que engloban varias vistas orales. La mayoría de las sesiones se han centrado en conflictos relativos a transporte de mercancías, aunque también han tratado asuntos relativos a transporte de viajeros.
Entre las ventajas del arbitraje se puede mencionar el que los laudos arbitrales ofrecen la ventaja de ser de obligado cumplimiento, por lo que tienen la misma validez que una sentencia judicial, siendo el proceso es mucho más económico y ágil. Además, las Juntas Arbitrales de Transportes son gratuitas y no precisan la asistencia de ningún abogado o procurador. Además, participan órganos especializados del sector, en los que están representados los transportistas, los cargadores y también los usuarios, lo que garantiza su objetividad.
