La industria del transporte origina en Europa aproximadamente el 25% de las emisiones de CO2, por lo que se hace necesario encontrar alternativas competitivas frente al diésel. El gas natural es una de ellas; si bien es cierto que es un combustible fósil, ofrece numerosas ventajas sobre el diésel, y además es más económico. Pero cuando el biogás licuado (BGL) se haga más común en el uso, la huella medioambiental de los vehículos que lo utilicen se reducirá hasta en un 70%.
"Estamos plenamente convencidos de que el gas licuado acabará utilizándose como combustible en todo el mundo. La tendencia es muy clara cuando hablamos de conciliar las necesidades energéticas", declara Lennart Pilskog, director de Asuntos Públicos en Volvo Trucks. Volvo Trucks, miembro de la Asociación de Vehículos de Gas Natural & Biogás (NGVA Europe), fue el primer fabricante, y todavía el único en Europa en emplear el sistema metano-diésel.
Manuel Lage, director general de NGVA Europa, declara que la tecnología para poder conducir utilizando GNL está ya probada, y que existe un gran número de empresas de transporte y proveedores de gas que siguen esta causa. "Cuando se trata de transporte de larga distancia y vehículos pesados, no hay ninguna alternativa que pueda igualar al GNL hoy en día", opina.
Ya se están implementando en muchas ciudades europeas las infraestructuras para el gas comprimido, que incluye biogás procedente de los desechos orgánicos, pero es a nivel local, por lo que hoy en día no es posible llevar a cabo operaciones de largo recorrido con gas comprimido ya que los depósitos que necesitan los camiones son pesados y voluminosos. En su forma líquida, sin embargo, el gas ocupa menos volumen, haciéndolo más adecuado para operaciones de largo recorrido.
Coordinación entre todos los protagonistas
Sin embargo, para poder realizar transportes a través de Europa usando como combustible el GNL, sería necesario el contar primero con una red de estaciones de servicio que surtieran dicho combustible. Por eso surgió la idea de los corredores azules’, red de estaciones de servicio de GNL para vehículos pesados. Implantar tal infraestructura no es tarea sencilla, ya que los proveedores de gas, los fabricantes de camiones, las operadoras de transporte y diferentes organizaciones políticas y administrativas tanto a nivel nacional como regional tienen que pronunciarse, y se necesitará una buena coordinación.
"El reto está en que tiene que estar coordinado por diferentes partes", declara Pilskog, añadiendo que Volvo ha sido muy activo en el proyecto demo Swedish BiMe Trucks, que es similar al de los ‘corredores azules’ pero a una escala menor. "Ahora mismo nos centramos en encontrar grandes empresas de transporte que quieran probar rutas específicas. El interés entre los clientes de menor tamaño crecerá cuando vean los beneficios económicos. Pero esto llevará algunos años".
Ya existen algunas estaciones de servicio de GNL en Europa, por lo que el trabajo de implantar un corredor azul está en camino. Usando estas estaciones como punto de partida, es posible identificar el número de corredores potenciales que se necesitan. "Si puedes coger un mapa y marcar los sitios donde existen estaciones de servicio, puedes trazar de manera sencilla las posibles rutas", añade Lage. Para poder lanzar este proceso, la Comisión Europea ha aportado ocho millones de Euros para un proyecto de corredores de GNL a gran escala.
"Espero que tengamos alrededor de 200 camiones rodando por estos corredores azules, demostrando que el GNL funciona como alternativa para el transporte en Europa", declara Manuel Lage. "Esto no es un sueño, toda la tecnología que necesitamos ya está disponible. El mercado está listo para la comercialización del GNL".
Volvo FM MetanoDiesel
En la primavera de 2011, Volvo Trucks lanzó el FM MetanoDiesel, que funciona con un 75% de gas metano licuado (LNG/LBG), siendo el primer fabricante europeo en presentar esta tecnología para ser usada en un motor diésel. Un camión propulsado con LNG, las emisiones de dióxido de carbono son un 10% en comparación con los propulsados con diésel.