La firma del acuerdo, en la que tomaron parte Martin Winterkorn, presidente del Consejo de Dirección por parte de la empresa alemana y Anatoly Artamonov, gobernador de la provincia de Kaluga, se realizó en la capital rusa. La planta será operativa a partir de 2015 y su capacidad de producción será de 150.000 unidades anuales. La nueva factoría se construirá junto a la ya existente planta de vehículos de Kaluga.
Según explica el propio Martin Winterkorn, "para el Grupo Volkswagen, Rusia es el mercado principal para el crecimiento estratégico en Europa." Para 2018, el fabricante alemán pretende vender medio millón de vehículos anuales en este mercado. Por ello invertirán cerca de 1.000 millones de euros en producción local y nuevos modelos que se sumarán a los 1.000 millones que Volkswagen ha destinado ya al mercado ruso. El motor que se producirá en Kaluga, la gama EA211 de 1.6 litros de gasolina, representa la última tecnología del grupo alemán.
La planta, en la que se han invertido 250 millones de euros, dispondrá de 30.000 metros cuadrados y producirá motores tanto para la fábrica de vehículos situada a su lado como para la planta de GAZ situada en Nizhny Novogorod. La compañía cumplirá así con el acuerdo que establece que al menos un 30% de los motores que equipen a los vehículos producidos en Rusia estarán también fabricados en el país.
