El proyecto, en el que se han invertido 26 millones de euros, se inició en el año 2008, para 'mejorar la percepción que los ciudadanos tienen del transporte público y la introducción de mejoras e innovaciones para la creación de un nuevo sistema de autobuses urbanos conjuntos". Los responsables de la UITP han señalado que con este proyecto, además de encontrar un enfoque único para definir el sistema de autobuses, se busca "lograr nuevos avances en el diseño de los vehículos, en infraestructuras y en operaciones".
Los nuevos sistemas informáticos, el innovador diseño de los vehículos, de las cabinas de conductor o de las estaciones de autobuses se han puesto a prueba, para la realización del proyecto EBFS, en escenarios "reales" de ocho ciudades europeas, como son Bremerhaven, Brunoy, Budapest, Gotemburgo, Madrid, París, Roma y Rouen.
Resultados del proyecto EBFS
La UITP ha detallado algunos de los resultados que ha aportado este estudio sobre la realización de un sistema de autobuses urbanos conjunto para toda Europa. Entre ellos, destacan los "beneficios de la arquitectura abierta, que consigue que los autobuses estén más conectados, mejorando su eficiencia y reduciendo los costes". Para los responsables de este estudio, gracias a este sistema "todos los operadores de Europa podrán acceder a la misma información, con la consiguiente reducción de costes".
Además, con este nuevo sistema de autobuses urbanos europeos conjuntos, se conseguirá "mayor capacidad de pasajeros, reducción del tiempo de esperas y de embarque, mejor accesibilidad entre el vehículo y la plataforma de entrada y salida para los usuarios, optimización del espacio de trabajo del conductor y del mantenimiento del vehículo.