Esta herramienta de planificación busca alcanzar cinco grandes metas: incrementar la calidad de vida en la ciudad; reducir el impacto ambiental derivado del transporte, especialmente ruido y gases de vehículos privados; mayor ahorro energético; un planeamiento urbanístico sostenible; y una mayor funcionalidad y eficiencia económica. Para ello, se busca implantar formas de desplazamiento más sostenibles, como caminar, la bicicleta o el transporte público, y una mejor convivencia entre los diferentes tipos de movilidad.
"Es un compromiso que adquirimos al inicio de este mandato, a fin de solucionar algunos conflictos que había surgido, fundamentalmente con el desarrollo de los carriles bicis y como un modelo de ciudad que queríamos implantar, más amable y responsable", según ha expresado la alcaldesa. Este plan de movilidad se encuentra en sintonía con otras acciones que "hemos emprendido sobre sostenibilidad y eficiencia energética, como las vinculadas a la Red de Ciudades Inteligentes o el Pacto de los Alcaldes recientemente suscrito en Bruselas", ha explicado.
La participación de los habitantes de Logroño en la redacción del proyecto ha sido fundamental y seguirá siendo enriquecido con las aportaciones de los vecinos en estos dos meses de exposición pública a la que se someterá tras la aprobación inicial. Se ha puesto en servicio una página web (www.movilidadlogroño.es) a fin de facilitar la recogida de sugerencias y propuestas.
Aplicación del Plan de Movilidad
La alcaldesa de Logroño ha contado que la previsión indica que el PMUS será aprobado definitivamente en el pleno de diciembre, a fin de que pueda comenzar su aplicación desde los primeros meses de 2014, para cumplir con la Ley de Economía Sostenible del Gobierno Central y seguir manteniendo la subvención al transporte urbano que anualmente se concede y que asciende a unos 700.000 euros.
La aplicación temporal del Plan llega por el momento hasta 2023, aunque contempla una primera fase de actuaciones inmediatas hasta 2015 y otras a medio plazo, hasta 2019. Los planes sectoriales, que durante estos periodos se desarrollarán, son: la ordenación de la circulación y estructura de la red viaria; estacionamiento; transporte público; movilidad peatonal; movilidad ciclista; gestión de la movilidad; mejorar de accesibilidad y supresión de barreras; circulación y distribución de mercancías; políticas urbanísticas y movilidad; mejora de la calidad ambiental y ahorro energético; accesibilidad a los grandes centros de atracción de viaje; seguridad vial; promoción de buenas prácticas en movilidad; oficina de movilidad y desarrollo del concepto de smartcity en las políticas urbanas. A su vez, estos planes se derivarán para su aplicación en un total de 51 programas y 116 medidas concretas.