En total, los equipos de prueba de Opel y su filial Vauxhall intentaron lograr doce Records Mundiales y seis Records Nacionales Británicos de Resistencia a Alta Velocidad. El sprint de 24 horas incluía la obligación de equipar los coches con arco de seguridad, asientos de competición (Corbeau) y arneses de seguridad (Luke), posteriormente el precintado y guardado bajo llave en un recinto seguro, bajo la supervisión de las autoridades deportivas hasta el mismo momento del intento. Opel/Vauxhall están aún esperando la confirmación por parte de la FIA de que este intento se ha llevado a cabo con éxito.
“Esto es un testimonio real de la fiabilidad, seguridad y prestaciones del Astra en condiciones extremas que un conductor normal nunca experimentará”, ha dicho Duncan Aldred, Vicepresidente en funciones de ventas y Posventa de Opel/Vauxhall y Presidente – Consejero Delegado de Vauxhall. “A veces se pone un gran énfasis en el 1% final del comportamiento de un coche, o en su aceleración de 0 a 60 mph, pero para la mayoría de los clientes, la excepcional fiabilidad, la seguridad y el buen comportamiento, son primordiales. Sobre todo, estas pruebas tienen la intención de demostrar esas virtudes”.