Por otro lado, la asociación española considera que "reforzar los derechos y obligaciones de los usuarios es esencial para que los modos de transporte colectivo mejoren la calidad de servicio (frecuencia, puntualidad, confort para todas las categorías de usuarios, seguridad, la política tarifaria, etc.)". La implantación de una carta europea de derechos y obligaciones de los usuarios de transporte colectivo "debería llevarse a cabo teniendo en cuenta las características de cada modo, especialmente las de aquellos que comparten las infraestructuras con otros", añaden desde la patronal.
A la pregunta de cómo coordinar mejor el transporte urbano e interurbano y la ordenación del territorio, o ¿qué tipo de estructura organizativa sería oportuna?, Asintra se decanta por "la creación de órganos coordinadores del transporte -vista la experiencia positiva en algunas ciudades europeas-, desarrollando los servicios con calidad, eficacia y eficiencia económica. En relación a la coordinación con los otros modos de transporte, señala que "se debe subvencionar al viajero, para lograr la libre elección de modo del usuario y mejorar la asignación de los fondos públicos". Además, "sería conveniente que los servicios interurbanos de transporte contasen con infraestructuras necesarias para el intercambio modal, de forma que se faciliten los transbordos entre los diferentes modos de transporte colectivo, evitándose así el transporte que el viajero ha de tomar para conectar un modo con otro". El papel de la UE en este tema consistiría en
fomentar el transporte en autobús en plataformas o carriles reservados, tanto en las zonas estrictamente urbanas, como en las cercanías de las grandes ciudades, lo que podría articularse a través de fondos europeos.
Apoyo a la iniciativa privada
La privatización del transporte público urbano, preferentemente en autobús, que permitiese la entrada de la iniciativa privada -que obtendría la explotación de los servicios mediante un sistema de concurrencia- significaría para Asintra "un impulso importante al transporte urbano limpio y eficiente desde el punto de vista energético".
En cuanto el establecimiento de posibles normas de tarificación estándar, a nivel internacional, Asintra señala que "los sistemas de tarificación o peaje para el acceso al centro de las ciudades resultan discriminatorios para los sectores de renta mas baja, teniendo escaso resultado disuasorio en los segmentos sociales de rentas altas". A su entender, "una alternativa con 'efectos horizontales' en todos los segmentos de renta sería el 'peaje en los puntos de acceso', pero no para el cobro de una cantidad de dinero sino para el computo de la cuota disponible de kilómetros urbanos que se asignaría a cada conductor". Esto decir, un 'racionamiento' del acceso (kilómetros/unidad de tiempo) lo que impondría seleccionar y administrar los trayectos urbanos a través del transporte privado. El transporte colectivo debe quedar excluido de este tipo de medidas por las ventajas que este modo tiene para el medio ambiente, la seguridad vial, la eficiencia energética, el uso racional de la infraestructura y la descongestión.
