El sistema usa seis sensores que escanean la zona donde se encuentra el camión y puede detectar obstáculos detrás del vehículo que el conductor podría pasar por alto a simple vista. TailGUARD le avisa, por medio de señales en la cabina, de que el objeto está entre los dos metros y los 50 cm y activa automáticamente el ABS del camión cuando cree que hay peligro de colisión.
"Desarrollamos sistemas de seguridad avanzados para proteger y salvar vidas en la carretera", dijo un directivo de la empresa. Hasta ahora el sistema TailGUARD, que apareció en 2010, sólo se instalaba en vehículos comerciales. Ahora, según la empresa, más de 5.000 camiones lo llevan instalados en toda Europa, a los que se sumarán los vehículos de recogida de residuos.
El TailGUARD es ideal para aumentar la seguridad de las flotas de recogida de basura porque suelen trabajar en espacios reducidos, en zonas pobladas y con tráfico.