Sin esta caja sería necesario un motor mucho más grande y caro, según Allison
La caja de cambios Allison es la clave de la cadena cinemática: el camión tiene que arrancar con un peso combinado de hasta 65 toneladas y alcanzar lo antes posible su velocidad punta para cumplir las apretadas jornadas de reparto. Esto es posible gracias al convertidor de par de la caja de cambios, que multiplica el par motor durante el arranque y la aceleración.
Además, la transmisión Allison elimina los cortes de potencia mejorando así la productividad del vehículo, incluso equipando un motor más pequeño. La marca asegura que sin las ventajas de la caja automática Allison, habría sido necesaria la transmisión directa de un motor mucho más grande y caro. El dispositivo para la toma de fuerza de la transmisión se utiliza para accionar la bomba hidráulica, evitando la necesidad de tener un generador eléctrico adicional.
Valía para la distribución urbana
“El camión eléctrico ha demostrado su valía en el sector de la distribución urbana y cumpliendo con las entregas “just in time” de la BMW”, afirma Ulf Frenzel, jefe de flota de SCHERM Group. “La caja de cambios Allison permite aprovechar al máximo la energía del motor eléctrico. Además, el camión eléctrico puede maniobrar sin problema y es extremadamente fácil de conducir”.
“La transmisión Allison demuestra diariamente tanto su fiabilidad como su facilidad de uso”, afirma Frenzel. “Además, el tiempo que este vehículo pasa en el taller es menor que el de los vehículos diésel convencionales. Esto nos permite ser más productivos y, por tanto, mucho más eficientes”.