iContainers señala que es importante considerar ciertos factores para minimizar las consecuencias
iContainers señala que, en estas circunstancias, es importante considerar ciertos factores para minimizar las consecuencias y mantener unas expectativas realistas sobre la eficiencia de las cadenas logísticas durante la temporada alta. A la hora de planificar sus campañas de importación durante la temporada alta, los expedidores deben tener en cuenta las subidas en los precios de transporte marítimo, que se producen rápidamente y se pueden mantener durante toda la temporada.
Las subidas llegan bajo la etiqueta de GRI (General Rate Increase) o la de PSS (peak season surcharge o recargo de temporada alta), dependiendo de la previsión que hagan las navieras sobre cuánto tiempo se mantendrán los altos volúmenes. “El PSS, al tener un periodo definido de aplicación, parece más fácilmente justificable, pero obliga a reducir las tarifas de nuevo una vez que la temporada alta llega a su fin. Con el GRI, sin embargo, las subidas pueden llegar a prolongarse mucho más en el tiempo, lo que a priori parece ideal para las navieras.”, indica Klaus Lysdal, vicepresidente de operaciones de iContainers.
Escasez de camioneros en Estados Unidos
Para aquellos que importan desde Estados Unidos, los problemas de disponibilidad y aumento de las tarifas de transporte terrestre se unirán a los problemas de capacidad y congestión propios de la temporada alta. Aunque la crisis provocada por la escasez de camioneros en Estados Unidos se ha aligerado en algunas áreas, todavía es un problema grave y la temporada alta amenaza con escalar el problema. A juicio de Lysdal, “los transportistas se han acostumbrado a las nuevas circunstancias y cada vez son más eficientes trabajando y planificando de acuerdo con las nuevas regulaciones, pero todavía son demasiadas las variables que pueden interferir en el sistema y provocar congestiones.”
Aquellos expedidores primerizos o que realicen envíos poco frecuentes encontrarán todavía más difícil asegurar un espacio para sus cargas durante la temporada alta. Para ellos, acudir directamente a las navieras es prácticamente una causa perdida durante dicha temporada y sus opciones son limitadas. Lysdal indica que el principal problema al que se enfrentan estos importadores es la falta de interés de las navieras por adquirir nuevos clientes durante las temporadas de mayor demanda.