Motivados por el reciente motor de
Scania de GNL de 410 CV, adquirió 4 tractoras de la marca.
También un rígido propulsado por el mismo combustible.
“A la hora de adquirir vehículos de GNL,
uno de los principales motivos fue la preocupación medioambiental que, evidentemente tiene que estar respaldada también por un motivo económico. Gracias a la fiabilidad que demuestra el vehículo, en un plazo de 2 años y medio o tres, la inversión debería estar amortizada y, a partir de ahí, todo sería ahorrar”, afirma Jesús Galindo, Manager de Transordizia.
La
empresa apostó por autoabastecerse, uno de los factores clave para ellos a la hora de incrementar el ahorro.
Jesús reconoce que
los conductores están contentos y aprecian el hecho de conducir un Scania. “Es prácticamente lo mismo que conducir un vehículo diésel”, “el repostaje es rápido”, “es un camión cómodo y muy silencioso”, son algunos de los comentarios de sus conductores.
Transordizia tiene previsto seguir incorporando vehículos GNL a su flota ya que “creemos que
el único combustible ahora mismo para la larga distancia que ser puede convertir en una alternativa respecto al
diésel”, comenta Jesús.