En este sentido, este pasado jueves 22 se ha mantenido una reunión en la Embajada francesa, en la que representantes del Ministerio de transporte francés han expuesto el procedimiento a seguir por las empresas transportistas cuyos vehículos se desplacen a Francia. Durante la reunión, los representantes franceses han reconocido que aún existen muchos aspectos por definir y concretar, entre otros, en lo referente a qué trayectos de transporte internacional están incluidos en dicha regulación, cómo se calcula el salario del conductor durante su estancia en Francia, cual es el importe del salario mínimo francés que debe aplicarse a la actividad de transporte, acerca de si dicha regulación es aplicable con carácter retroactivo, etc.
No está publicado en la página web oficial de la Administración francesa el modelo definitivo de declaración de desplazamiento
Asimismo durante la reunión se ha evidenciado que pese a que dicha regulación se pretende exigir dentro de una semana, a fecha de hoy no está publicado en la página web oficial de la Administración francesa el modelo definitivo de declaración de desplazamiento (“attestation de détachement”) que los vehículos de transporte deben llevar a cabo.
Inseguridad jurídica
Por todo ello, y ante la inseguridad jurídica que para las empresas transportistas españolas está ocasionando la falta de información precisa sobre la nueva regulación francesa, Fenadismer ha solicitado formalmente al finalizar la reunión con los representantes públicos franceses que se establezca una moratoria en su entrada en vigor, hasta que quede clarificado definitivamente el procedimiento aplicable. Asimismo, ante esta situación, Fenadismer va a instar a los Ministerios españoles de Fomento y de Asuntos Exteriores que defiendan ante el Gobierno francés los intereses de las más de 30.000 empresas transportistas españolas que operan en el ámbito internacional, informándonos de las gestiones realizadas.
En relación con lo anterior, Fenadismer dirigió la pasada semana una queja formal ante la Comisión Europea por considerar que la nueva regulación francesa incumple manifiestamente la Directiva europea 2014/67/UE sobre desplazamiento transnacional de los trabajadores, en especial en lo referente a la obligación de los Estados miembros de garantizar que la información sobre las condiciones de empleo que los prestadores de servicios deben aplicar, que obliga a que se informe sobre la nueva regulación en varios idiomas, que la información sea clara y fácilmente accesible y que se indique una persona de contacto para tramitar las solicitudes de información, cuestiones todas ellas que se han incumplido por parte de la Administración francesa.