Los datos publicados por el
Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran una ralentización, ya que mientras que el aumento de viajeros en transporte público urbano entre enero y mayo de 2017
fue de un 3,8%, en el mismo periodo de este año
ha sido del 2,2%. Por ello,
Atuc urge a tomar medidas que potencien el uso de autobuses, metros y cercanías. Máxime teniendo en cuenta que las emisiones contaminantes se dispararon en 2017 un
4,4%, la mayor subida de los últimos 15 años; que del tráfico rodado proceden el 50% de las mismas en los centros urbanos; y que de ellas
más del 90% corresponden al tránsito de coches. Asimismo, destaca los efectos colaterales tan negativos que tiene sobre la salud de las personas y la economía del país la congestión de calles y carreteras.
Atuc advierte de una caída de un punto con respecto a 2017 (cuando crecieron un 3%) y urge a tomar medidas que fomenten su uso
Y entre las medidas que mejor contribuirían al necesario cambio modal por el que cada vez más personas decidan usar el transporte público para sus desplazamientos diarios, Atuc destaca el aumento de las frecuencias de paso y la reducción de la duración de los trayectos. Para ello, la Asociación propone un Plan Nacional de Movilidad Urbana que siente las bases de la movilidad sostenible en las ciudades españolas.
Atuc también aboga por acelerar la Ley de Cambio Climático, que debería recoger un capítulo específico sobre transporte público en el cual se tendría que instar explícitamente al desarrollo de una Ley de Financiación, de la que España carece actualmente siendo una excepción en toda Europa.
Según el secretario general de Atuc,
Jesús Herrero, “el crecimiento de viajeros en transporte público no puede depender únicamente de la coyuntura económica y la llegada de turistas, sino que debería obedecer a un flujo constante de usuarios procedentes del coche privado, por lo que se requieren medidas que desincentiven su uso y reduzcan su presencia en las ciudades”.
