En el año 2007, UOTC denunció ante el Servicio de Defensa de la Competencia —precursora de la Comisión Nacional de Competencia— a Renfe, por abuso de posición dominante y competencia desleal. Tras un año de estudio, dicho Servicio no envió la denuncia al Tribunal de la Competencia y la archivó, consintiendo por tanto, la política y actuaciones de Renfe, y apoyando indirectamente, en opinión de la UOTC, la situación que ahora se critica.
UOTC presentó, entonces, contra esa decisión, un recurso contencioso-administrativo, ante la Audiencia Nacional, que sigue actualmente su curso. Ahora, dos años después, la Comisión Nacional de Competencia sí reconoce la posición de dominio, y arremete contra Renfe por sus privilegios.
UOTC ha querido mostrar su satisfacción, ya que "por fin, los Servicios de Competencia han sido conscientes de la situación existente". La organización manifiesta su firme deseo de "seguir defendiendo la necesidad de tener un mercado ferroviario completamente liberalizado, con operadores ferroviarios compitiendo sin distorsiones". En su opinión, "España necesita que se impulse la competitividad de la economía, a través, entre otros, de la promoción de la intermodalidad y el funcionamiento de un mercado ferroviario eficiente, libre y competitivo".