Según informa Fenebús, el primer caso es el de Keolis Nordic, subsidiaria de Keolis, que ha adquirido el control de la totalidad de Busslink –dedicada a la explotación de servicios de autobús en Suecia- mediante la compra de acciones. En opinión de la Comisión, esta operación podría entrar dentro del ámbito de aplicación del reglamento europeo sobre concentraciones e invita a los interesados a presentar observaciones.
El segundo caso es el de Veolia Environnement y la Caisse des Dépôts et Consignations que han adquirido el control de Transdev y Veolia Transport, reagrupándose en la entidad Veolia Transdev.
Finalmente, la Comisión Europea estudia el proceso de concentración entre Deutsche Bahn y la inglesa Arriva, una operación que también considera que podría entrar en el ámbito de aplicación del reglamento comunitario sobre concentraciones.