Un convenio ha formalizado lo que hace tres años era un programa piloto con el que se beneficierán alrededor de cien personas enfermas o con discapacidad del medio rural gracias a este nuevo servicio que podrá acercarles a centros de salud, rehabilitación, terapia o a recibir otro tipo de tratamiento. La intención es que estas personas que residen en las zonas rurales solventen en gran parte sus limitaciones de movilidad y tengan las mismas facilidades que las que residen en la ciudad.
El servicio consistirá en que si un usuario necesita desplazarse por motivos de atención sanitaria, la asociación pondrá a su disposición una ambulancia, taxi o autobús en caso de que sea un grupo más numeroso. Con el nuevo servicio, la agrupación será quién lo solicite y pague el transporte con la subvención que le conceda la Diputación.
Según explica la diputada de Bienestar Social, Maribel Escribano, esta iniciativa ha estado funcionando de manera experimental durante un trienio y he tenido como resultado que seis asociaciones hayan accedido a él y que hayan sido atendidos alrededor de unos 100 usuarios.