Algo fundamental como indica la OMS en su informe sobre el efecto de las partículas de motores diésel en la salud. Los vehículos diésel equipados con filtro de partículas se han duplicado, pasando del 54% al 100% actual, en solo cinco años.
Dispositivos de alta tecnología diésel, como el filtro de partículas, sistema de inyección directa, gestión de electrónica avanzada, permiten una fuerte reducción del impacto medioambiental de los vehículos. Sin embargo, la escasa renovación del parque, debido a la situación de crisis, provoca una ralentización en la mejora de las prestaciones medioambientales que aportan los vehículos diésel al parque de turismos. La edad media del parque de vehículos diésel es algo menor que la general, con una media de 9 años, debido al fuerte impacto en el mercado de las motorizaciones diésel en los últimos años.
El Informe de Anfac Research para el Grupo Bosch, muestra además que si no se hubiera producido el envejecimiento prematuro del parque automovilístico español, las reducciones de partículas, motivado por los nuevos sistemas, hubieran sido aproximadamente un 44% mayores. Sin duda, el Plan PIVE provocará un efecto positivo en el parque al sacar de la circulación vehículos antiguos y reemplazarlos por nuevos, equipados con las últimas tecnologías.