En primer lugar, se tiene en cuenta la puesta en marcha la construcción de cuatro intercambiadores de transporte como el de Valdebebas, cuyas obras comenzarán en el segundo trimestre del año y por otro el de Conde de Casal, estas obras no darán comienzo hasta finales de año. También se comunica que se está trabajando en otros dos proyectos de intercambiadores: en Legazpi y el área intermodal de Chamartín que prestará servicio al desarrollo de Madrid Nuevo Norte.
Nuevos sistemas e infraestructuras, entre las actuaciones previstas
En lo que respecta al transporte profesional, uno de los objetivos a cumplir es continuar con la garantía de seguridad en el transporte profesional de mercancías y viajeros, para ello se aprobará un nuevo plan de inspección que incidirá en las conductas infractoras que afectan a la competencia entre las empresas, distorsionando el mercado del transporte.
Por otro lado, también se desarrollarán las normas legislativas necesarias para la regulación y modernización del sector del transporte de viajeros.
La apuesta por un transporte distinto se hace pantente con la impulsación del uso de la intermodalidad bici + transporte público con la instalación de nuevos aparca bicis en estaciones e intercambiadores de transporte y con la integración de los distintos sistemas.
Adaptación a las nuevas tecnologías
Este año será el primer ejercicio completo en el que la adaptación a las nuevas tecnologías en sistemas de pago y recarga de títulos por telefonía móvil a través de smartphone entre en juego en su totalidad y deberá plenamente operativa. En el marco del Plan Estratégico de Movilidad Sostenible, se considera la implantación de aparcamientos disuasorios y la intermodalidad con el transporte público, con un progreso paulatino.
A su vez, no se olvidará la promoción de la accesibilidad y supresión de barreras arquitectónicas en el sistema de transporte público con las que se contunará como hasta el momento mejorando puntos.
Finalmente, este año 2022 se llevará a cabo la implementación del proyecto de pago de EMV en el transporte interurbano (con tarjetas de pago de crédito y débito), que poseen el diseño del esquema inicial de actuaciones y la determinación de las premisas para poder establecer este sistema de pago.