La agencia Reuters confirmaba que los resultados financieros de esta entidad no son los que esperaban, por lo que ha decidido retrasar la evolución de sus proyectos de autobuses y coches eléctricos para recortar costes y centrarse únicamente en la producción de su primera furgoneta. Centrados en la Van El devenir de los acontecimientos había provocado que Arrival anunciara, el pasado mes de julio, un posible recorte de su plantilla, que podría llegar al 30% según algunas fuentes, y acelerar así el desarrollo de la Arrival Van, con la vista puesta en ponerla en marcha antes de final de año. En cualquier caso, que el bus y el turismo se ‘aparquen’ no es la mejor de las señales, y podrían ser un detonante de que la crisis internacional está llegando al Sector, con más fuerza todavía.