El servicio nació con 11 líneas y actualmente cuenta con 29
Los primeros autobuses municipales que echaron a rodar para transportar a viajeros por la noche lo hicieron el 1 de octubre de 1974, y ya nunca se han detenido. La creación del servicio nocturno se denominó en aquel momento 'Circuito nocturno', y surgió como respuesta a las necesidades de la ciudadanía a desplazarse de madrugada tanto por motivos laborales como por el incipiente ocio nocturno.
Este 'Circuito nocturno' contaba con 11 líneas que unían el centro de Madrid con distintas zonas periféricas, y todas ellas coincidían en la plaza de Cibeles a horas fijas para permitir a los usuarios realizar correspondencias entre líneas. La tarifa ascendía a 15 pesetas e incluía otro viaje con correspondencia en Cibeles. En esos tres primeros meses de 1974, en los que la red abarcaba 254,35 kilómetros, 223.342 viajeros recorrieron las calles de Madrid con nocturnidad subidos a bordo de un bus de EMT Madrid.
Crecimiento continuo
Hoy por hoy, 50 años después, el servicio nocturno goza de una excelente salud y no ha dejado de crecer en estos años. E en la actualidad, está compuesto por 29 líneas, y durante este año un total de 5,29 millones de viajeros se han subido a un 'búho', casi triplicando los datos del primer año completo del servicio. Además, la red ha crecido de forma sostenible en cuanto a superficie abarcada, puesto que ahora cubre 774,42 kilómetros diariamente, más de un 200% de lo que recorría al nacer.