Para el presidente de la Cámara alavesa, Román Knörr, "el acuerdo permitirá institucionalizar las relaciones existentes entre ambas entidades, que, a su juicio, "ya se han visto trasladadas a acciones concretas como la creación del puerto seco ubicado en la localidad Júndiz". José Ángel Corres, presidente del Puerto de Bilbao, aseguró durante el acto oficial en el que se llevó a cabo la firma del convenio, que las compañías alavesas, en su mayoría de gran tamaño, aportan un tráfico anual de "dos millones de toneladas", lo que supone el 10% de la carga sólida total que pasa por los muelles vizcaínos. Uno de los objetivos de la infraestructura bilbaína es, según Corres, lograr que otro tipo de empresas, de nueva creación y de dimensión menor a la de aquellas que forman el grueso de sus principales clientes, se conviertan en "usuarios habituales del Puerto".
Los centros de mercancías de Álava han permitido al Puerto de Bilbao, en opinión de su presidente, "encontrar clientes fuera del ámbito provincial", lo que supone un hecho a tener en cuenta. Zonas como la Ribera de Navarra y Aragón han sido las últimas conquistas del puerto vizcaíno, desde la apertura del puerto seco de Júndiz, que lleva menos de un año de funcionamiento.