www.nexotrans.com

DEFIENDE EL TRASPASO HACIA EL FERROCARRIL

El RACC pide pruebas piloto en determinados tramos antes de permitir la circulación de las 60 t

El Club considera necesaria una evaluación del impacto de los ‘mega-trucks’ en términos de coste-beneficio

miércoles 21 de enero de 2015, 01:00h

En referencia a la modificación del Reglamento General de Vehículos que permitiría la circulación por la red viaria española de camiones de masa máxima de 60 toneladas, el RACC ha emitido un comunicado en el que solicita su suspensión "mientras no se haya realizado una prueba piloto en determinados tramos de la red de carreteras y hasta que no se evalúe su impacto en términos de coste-beneficio".

España ha aumentado el transporte logístico por carretera en un 1,1% (de 94,1% a 95,2%) en relación con el ferrocarril, una tasa más elevada que los demás Estados miembros de la comparativa.
España ha aumentado el transporte logístico por carretera en un 1,1% (de 94,1% a 95,2%) en relación con el ferrocarril, una tasa más elevada que los demás Estados miembros de la comparativa.

En la actualidad, el transporte de mercancías en España se realiza en camiones de hasta 16,5 metros, entre cabeza tractor y remolque, o de 18,5 metros en camiones rígidos que sumen un remolque.

Prueba piloto decisiva

El RACC propone una evaluación previa con tal de conocer en qué medida se consiguen los objetivos planteados referentes a ahorro energético, disminución de emisiones y menores costes en la actividad del transporte. El estudio previo también permitiría valorar parámetros referentes a:
- Seguridad vial: cómo se comportan los dispositivos de seguridad activa, como por ejemplo el sistema de freno, en este tipo de vehículos.
- Afectación en las infraestructuras: mayor deterioro del pavimento de la carretera y afectación en los sistemas de contención de vehículos en caso de impacto. Apostar por el transporte ferroviario de mercancías La propuesta de autorización de una mayor carga logística por vehículo en carretera (camiones de 25,25 metros de longitud y 4,5 metros de altura) puede tener un impacto negativo en el transporte ferroviario de mercancías que se concibe como una alternativa al transporte logístico por carretera. En este caso, el transporte ferroviario optimiza de forma notable los costes de transporte sin afectar la circulación de las carreteras y permite una menor emisión de contaminantes producidos por la movilidad motorizada.

Desde el RACC recuerdan que "las directrices europeas inciden en el traspaso logístico hacia el ferrocarril tal como ya están haciendo países como Alemania, Reino Unido, Italia y Dinamarca, que han incrementado las correspondientes tasas de transporte ferroviario de mercancías entre 2002 y 2012. En cambio, la evolución española en este mismo periodo ha aumentado el transporte logístico por carretera en un 1,1% (de 94,1% a 95,2%) en relación con el ferrocarril, una tasa más elevada que los Estados miembros mencionados" (ver tabla).

Requisitos técnicos necesarios

Además de la necesidad de empezar con un piloto acotado en el tiempo, el RACC considera que con anterioridad a la posible aprobación de la reforma del Reglamento General de Vehículos, hace falta tener presente cuatro aspectos técnicos clave:

La conversión de vehículos que no han sido fabricados específicamente para cargas de hasta 60 toneladas debería estar sujeta a rígidos requisitos técnicos y controles previos a la autorización.

Toda circulación prevista de este tipo de vehículos debería restringirse únicamente a vías de alta capacidad, excluyendo vías urbanas y secundarias de sus itinerarios. El RACC considera que se deberían limitar también los horarios de circulación.

Se debería proporcionar una señalización viaria específica para estos vehículos previamente a la autorización de circulación.

Se debería referenciar la autorización que pueden obtener vehículos de grandes dimensiones de otros Estados miembros. De igual manera, no se especifica la validez de las autorizaciones españolas en el resto de Europa.