13 de estos nuevos vehículos, siguiendo la apuesta de la Comunidad de Madrid por la sostenibilidad y la mejora de la calidad del aire, son híbridos. Así lo ha señalado el consejero de Transportes, Vivienda e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, que ha informado que con estos autobuses se consigue una reducción de emisiones de CO2 del 85% frente a motores convencionales y un ahorro de combustible estimado del 40%.
Poseen una alarma sonora que interactúa con la programación del vehículo y permite avisar del acercamiento a la parada de autobús
Además, están equipados con un nuevo sistema, que supone una mejora en materia de seguridad, llamado 'Soneta Ecológica', una alarma sonora que interactúa con la programación del vehículo y permite avisar del acercamiento a la parada de autobús. Todos los autobuses cuentan con sistema de vídeovigilancia interior con cuatro cámaras, e incorporan además puertos USB, para una carga rápida de teléfonos y tabletas. Asimismo, disponen de una red WiFi abierta, sin necesidad de introducir contraseña.
El CRTM apuesta así por la renovación de su flota de autobuses, con modelos más modernos, que ofrecen mayor confort a los usuarios, a la vez que son más eficientes y ecológicos. Prueba de ello es que el 71,4% de los 1.832 autobuses interurbanos que circulan por la región emplea energías limpias.
Iniciativas como estas reflejan la apuesta de la Comunidad de Madrid por mejorar cada vez más el sistema de transporte público, que desde el inicio de la legislatura ha renovado 145 autobuses.
Mejora del medio ambiente
Continúa así el trabajo del Gobierno regional para apoyar medidas encaminadas a la mejora del medio ambiente, potenciando el uso de estas energías alternativas en el transporte público, que juegan un papel fundamental en la mejora de la calidad del aire. Esta medida está contenida en el programa electoral de la presidenta
Cristina Cifuentes, en cuyo apartado 252 contempla un
Plan basado en la Estrategia de la Calidad del Aire y la lucha contra el cambio climático, con la que se da cumplimiento al mismo.
Gracias a la constante renovación de las flotas de autobuses del CRTM mediante vehículos menos contaminantes,
la Comunidad de Madrid cumple holgadamente con el objetivo de evitar la emisión de cuatros millones y medio de toneladas de CO2 al año que se fijó para 2012. De hecho, según el Inventario de Emisiones de la Comunidad de Madrid, se ha conseguido evitar emitir a la atmósfera 10,8 millones de toneladas de emisiones de CO2 en los últimos años.
