El lugar que dejan libre los taxis quedará para uso exclusivo de peatones, ciclistas y el transporte público
Entre las modificaciones proyectadas se encuentra el aprovechamiento de la ubicación privilegiada de la estación de trenes, que permite conectar de manera óptima y rápida el transporte público urbano e interurbano y crear el principal intercambiador de viajeros de Asturias. Tras los cambios, la parada de taxis situada frente a la entrada principal pasará a la cota más alta de los tres niveles en los que se distribuirá la nueva infraestructura (en la plaza de Ferroviarios).
El lugar que dejan libre los taxis quedará para uso exclusivo de peatones, ciclistas y el transporte público y el nivel más bajo lo utilizarán los vehículos privados, que tendrán su propia zona de paso para no entorpecer al resto de usuarios. Esta intervención, del mismo modo, estará coordinada con el proceso de peatonalización de la calle Uría, eje principal de unión con la plaza de Escandalera, y permitiría también mejorar la conexión del barrio de Ciudad Naranco con el centro.
En materia de tránsito, además de la implementación de Vías 30 que permitan la circulación de bicicletas de un modo seguro, se construirá una red de carriles bici en las que se buscarán trazas de pendiente favorable y anchura tolerable para unir el centro de la ciudad con los barrios. En concreto, la red sumará 44 kilómetros y se ha diseñado teniendo en cuenta los desplazamientos que los ovetenses realizan con mayor frecuencia en vehículo privado. Así, se generará un modelo competitivo frente al vehículo privado. El proyecto, asimismo, permitirá reducir la congestión del casco urbano, aumentar la seguridad de los ciclistas y reducir las emisiones contaminantes. “Son cuatro grandes ejes que se unirán en un gran anillo; Lugones-Oviedo centro; Colloto, Las Campas y otro desde El Cristo”, ha especificado Del Páramo.
Apuesta por el vehículo eléctrico
Y el PMUS recoge también una apuesta decidida por el vehículo eléctrico.
Actualmente Oviedo cuenta con 13 puntos de recarga para los vehículos eléctricos, a los que se añadirá una ecoestación en La Corredoria. Desde el Ayuntamiento de Oviedo se trazará una red urbana de puntos de recarga que cuente con un sistema de control y gestión centralizado. “Todos estos cambios nos acercan al urbanismo de vanguardia que se está implementando en las principales ciudades de Europa”, ha señalado Ignacio Fernández del Páramo. El concejal ha aclarado también que la puesta en marcha del plan de movilidad subirá la capital de Asturias al “urbanismo sostenible” que coloca a las personas en el centro de la planificación de las ciudades.