El Sector es consciente de la importancia tanto del factor humano como del factor técnico cuando ocurre un accidente, por eso añadirá sistemas de mejora
Durante 2019 se produjeron 1.007 accidentes mortales en los que murieron 1.098 personas, de las cuales el 46% viajaban en turismo (505 víctimas), convirtiéndose en el tipo de vehículo con mayor nivel de implicación en accidentes de tráfico. Le siguen los usuarios vulnerables con 438 víctimas (motoristas, peatones, ciclistas y ciclomotoristas). Así, el autobús, con la tasa de siniestralidad más reducida de los modos de transporte por carretera, se posiciona con niveles similares a los de la aviación o el ferrocarril, y como modo 20 veces más seguro que el vehículo privado.
“Esta cifra de cero víctimas demuestra que el autobús va, sin duda, por el bueno camino en materia de seguridad. Sin embargo, en el Sector somos conscientes de la importancia tanto del factor humano como del factor técnico cuando ocurre un accidente. Por eso, vamos a seguir incorporando sistemas de mejora para reducir los accidentes a la mínima expresión e invirtiendo en formación para mejorar la alta profesionalidad de los conductores de autobús”, destaca Rafael Barbadillo, presidente de Confebús.
La seguridad del pasajero es crucial para el Sector
Para el Sector, la seguridad de los pasajeros es un elemento prioritario, ya que es un modo de transporte que cuenta con más de 3.000 millones de viajeros al año y que llega a todos los rincones de nuestro país. Esto se manifiesta en la elevada profesionalidad y responsabilidad de los conductores, así como en vehículos cada vez más punteros en lo que se refiere a la seguridad. En este sentido, el Sector está continuamente a la vanguardia para incorporar los últimos avances. Por ejemplo, los autobuses cuentan con múltiples elementos de seguridad activa como sistemas de frenado de emergencia, asistente de carril, control de presión de neumáticos o cámaras de visión internas y externas. Como elementos de seguridad pasiva, incluyen cinturones de seguridad, resistencia estructural al vuelo o anclajes, entre otros.
Igualmente, como parte de su compromiso con la sociedad y con la seguridad,
Confebús ha propuesto además a la Dirección General de Tráfico medidas adicionales como la tolerancia cero de alcohol y drogas a los conductores profesionales; la instalación de alcoloks obligatorios en los vehículos matriculados a partir de una determinada fecha; que las empresas de transporte sean conocedoras del saldo de puntos de sus conductores, a través de notificaciones automáticas; y que los conductores se sometan a reconocimientos médicos periódicos como se hace en otros modos de transporte.