"XPO es una empresa que, a pesar de ser “líder” en logística, en el punto álgido de la pandemia de Covid-19, fue incapaz de conseguir mascarillas para proteger a su propio personal de almacén"
Este informe ha sido elaborado por la familia sindical mundial XPO, una coalición de sindicatos que representan a los trabajadores y las trabajadoras de XPO a nivel mundial. Observamos con preocupación como XPO reduce y sacrifica los derechos, la protección y la retribución digna de sus 100 000 trabajadores y trabajadoras a cambio de “logros” de expansión a corto plazo y beneficios imprevistos para lucro de sus directivos. La familia sindical mundial XPO ha pedido a la empresa en repetidas ocasiones reunirse y resolver los problemas encontrados en sus cadenas de suministro en todo el mundo. Hasta la fecha, XPO se niega a reunirse.
Una parte del informe es el siguiente:
XPO se presenta como líder mundial en la prestación de servicios de transporte, logística y entrega de última milla. Se jacta de poseer una cultura corporativa basada en su personal, y de estar revolucionando la forma de repartir las mercancías alrededor del mundo.Pero detrás de su pulida imagen de marketing, encontramos unas cadenas de suministro sumidas en la explotación laboral, un enfoque arrogante, e incluso negligente, en materia de seguridad que ha ocasionado lesiones y muertes,y una empresa que impone represalias a los trabajadores y trabajadoras que protestan contra la discriminación por embarazo y acoso. El presente informe reúne las voces de los trabajadores y trabajadoras de la red mundial de XPO. Sus historias, en conjunto, perfilan una cultura corporativa tóxica, donde son moneda corriente el robo de salarios, la explotación, la discriminación por motivo de género y de embarazo, el acoso sexual y los entornos de trabajo peligrosos.
Como muestran sus historias, XPO es una empresa que, a pesar de ser “líder” en logística, en el punto álgido de la pandemia de Covid-19, fue incapaz de conseguir mascarillas para proteger a su propio personal de almacén. Una empresa que dijo a sus trabajadores que compraran o fabricaran sus propias mascarillas para que siguieran trabajandoy asegurarse de que las cadenas de suministro de XPO no interrumpían su funcionamiento.
Una empresa que castiga a sus trabajadores por tratar de arreglar los problemas de seguridad y culturales que hay en los centros de trabajo, y que limita los turnos a los miembros del sindicato, impidiéndoles ganar lo necesario para vivir por el mero hecho de plantear los problemas.
Covid-19: ¿Sacrifica XPO la salud de sus trabajadores y trabajadoras de primera línea por afán de lucro?
Los trabajadores y trabajadoras de transportes y almacenes de XPO han seguido trabajando durante la pandemia para garantizar la continuidad y la seguridad de las cadenas de suministro nacionales y mundiales. El presidente y director ejecutivo, Bradley Jacobs, se jactaba de que XPO está construida como un “tanque a prueba de balas”, capaz de capear el virus.
Pero los trabajadores y trabajadoras que mantienen en funcionamiento las cadenas de suministro que deberían materializar esa conclusión de Jacobs no se sienten tan invulnerables al impacto del virus. Afirman tener miedo
de ir a trabajar y que la compañía no se tomó en serio sus preocupaciones en materia de seguridad.
“...la gente sigue aterrorizada por la posibilidad de contraer Covid”
En el culmen de la pandemia, esta compañía “líder” de la logística fue incapaz de distribuir a su personal equipos de protección personal (EPP) y envió a sus trabajadores videos mostrándoles cómo podían fabricarse ellos mismos sus propias mascarillas, utilizando camisetas usadas y bandas elásticas. Gerentes y supervisores dijeron a sus trabajadores de almacén que mostraron preocupación que se compraran sus propios geles desinfectantes de manos, si tanto les preocupaba la transmisión del virus a través de los equipos que compartían en el almacén. Mientras, los camioneros continuaban trabajando con horarios agotadores y sin tener acceso a EPP ni a saneamiento. La familia sindical mundial XPO solicitó a la compañía una reunión para analizar la pandemia y crear un foro mundial sobre salud y seguridad para proteger al personal, a sus familias y a las comunidades en las que trabajan. XPO declinó reunirse.
El brote de Swindon: “La gente sigue aterrorizada por la posibilidad de contraer Covid”: En julio de 2020, 64 personas dieron positivo en la prueba de COVID-19 en un centro de distribución de XPO en Swindon, Reino Unido. Al menos dos de los trabajadores infectados tuvieron que recibir tratamiento hospitalario. En total, 150 de los 750 empleados del centro tuvieron que aislarse. A pesar del elevado número de casos confirmados, XPO optó por no poner en cuarentena el centro y siguió funcionando. Paralelamente, la empresa seguía afirmando que la protección de sus empleados era su prioridad número uno.El sindicato Unite the Union afirmó que los empleados tenían miedo de volver al trabajo y sentían que los mantenían desinformados.El responsable regional de Unite, John McGookin, condenó la inacción y la falta de comunicación de la empresa: “Seamos honestos, si cualquier otro centro tuviera el número de casos que ha tenido este en una ciudad tan pequeña, estaría sopesando seriamente ponerlo en cuarentena”, afirmó.“No tenemos ni idea de por qué ellos [XPO Logistics] no lo han hecho. No se están comunicando con nosotros”. McGookin dijo a BBC Radio que, a pesar de que hicieron tests a la gran mayoría de los empleados, a estos les seguía preocupando ir a trabajar: “...la gente sigue aterrorizada por la posibilidad de contraer Covid”.
