www.nexotrans.com
Confebus solicita una subida de las tarifas, para paliar el elevado precio del gasóleo
Ampliar

Confebus solicita una subida de las tarifas, para paliar el elevado precio del gasóleo

El precio del litro de gasóleo acumula un encarecimiento del 40% desde mayo de 2020

lunes 22 de noviembre de 2021, 07:00h
Según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea, desde el comienzo del año el precio del gasóleo ha mostrado una tendencia al alza continua hasta alcanzar en España los 1,385 euros por litro, una cifra que no se veía desde 2013 y que está a un paso de superar su máximo histórico, situado en 1,4 euros. Así, en lo que va de año, el precio del litro de gasóleo acumula ya un encarecimiento del 26,2%. En concreto, desde mayo de 2020, cuando el precio del gasóleo se encontraba en 0,99 euros por litro, se ha producido un incremento de casi un 40%.

Al respecto, Confebus pone de manifiesto que esta escalada de la segunda componente más importante de la estructura de costes de las empresas de transporte en autobús podría lastrar la recuperación de las ya deterioradas cuentas de un Sector que se ha visto gravemente afectado por la pandemia, con unos niveles de demanda aún lejos de los de 2019.

Los empresarios de transporte están llevando directamente a su cuenta de resultados el incremento de costes del gasóleo, por lo que desde Confebus se solicita una revisión extraordinaria tarifaria para poder actualizar el precio en función de la evolución del gasóleo, para reequilibrar las concesiones de los servicios regulares de viajeros por carretera y los de uso especial competencia de la Administración Autonómica. Los empresarios han de trasladar, también a precios, estos incrementos en los contratos de ámbito privado no sometidos a tarifas o contratación administrativa.
Asimismo, es necesaria la modificación de la fórmula polinómica de revisión tarifaria para los servicios regulares, introduciendo un factor corrector que tenga en cuenta variaciones importantes de alguna de las partidas que conforman la estructura de costes. En lo referente al combustible, cualquier incremento o disminución superior al 10%, en más o en menos, con respecto al IPC, habría de tener un reflejo automático en las mismas.

Este incremento extraordinario de tarifas debería ser de, al menos, del 6%, para permitir cubrir el déficit acumulado y evitar que el incremento del precio de los carburantes no lastre aún más el equilibrio económico de los concesionarios. Esta revisión tarifaria es fundamental para garantizar en el corto y medio plazo la provisión de unos servicios de movilidad esenciales para la sostenibilidad económica, social y medioambiental, y con unas exigencias y unos niveles crecientes de calidad.

Conviene recordar que, en materia medioambiental, el autobús es el modo de transporte que menos gases de efecto invernadero genera y es únicamente responsable del 0,42% del total de las emisiones de CO2 del transporte por carretera en España. Igualmente, es el segundo modo de transporte motorizado menos contaminante en emisiones de CO2 -68 gramos de dióxido de carbono por pasajero y km- sólo por detrás del tren.

Además, el sector ha basado su evolución y transformación en el fomento de la transición hacia una flota de combustibles alternativos y el empleo de la tecnología para mejorar la eficiencia y reducir las emisiones. Pese a la estrategia de sostenibilidad trazada por el sector, el incremento del precio del combustible supone un problema adicional para la lenta recuperación del transporte en autobús.

Es difícil entender el desarrollo del sector del transporte en España sin tener en consideración el esfuerzo inversor que se ha realizado a lo largo de las últimas décadas para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), lo que nos sitúa como columna vertebral de la movilidad sostenible. El autobús es un sector esencial para la actividad económica y social, estrechamente ligado al turismo, por lo que resulta un actor imprescindible para asegurar la movilidad de las personas, acceder a los servicios básicos del estado del bienestar y asegurar la calidad de vida de las personas. En su conjunto, en 2019 garantizó la movilidad a más de 3.100 millones de viajeros al año, comunicando a más de 8.000 poblaciones y generando empleo para 95.000 personas, siendo además un eslabón clave de la principal industria de nuestro país, el Turismo.