BYD y Shell han firmado un acuerdo de cooperación estratégica con el objetivo de acelerar la transición energética. Se centrará en la mejora de las redes de carga para vehículos eléctricos en China y Europa, antes de extenderse a otras regiones del mundo.
Ampliación de puntos de carga
Uno de los puntos principales del acuerdo supone la formación de una asociación europea de servicios de movilidad, que pretende facilitar la carga para los propietarios de BEVs (eléctricos puros) y PHEVs (híbridos recargables) de BYD. Esto supondrá la creación de una red de 275.000 puntos de carga en el territorio europeo.
En el caso de China, esperan implantar una red de más de 10.000 puntos de carga en Shenzhen, para después expandirse a otras regiones del país. Por otra parte, ambas compañías se comprometen en el desarrollo de soluciones de carga para el hogar. Estarían orientadas a la programación dinámica de las tarifas eléctricas, la integración de recursos solares u otras baterías.
Acuerdo por la innovación
Otro de los elementos a tener en cuenta del anuncio es la predisposición de ambos para continuar en la carrera por la innovación. Se comprometen a colaborar en la investigación y desarrollo de baterías y sistemas de carga.
