La escasez total en Europa podría superar los dos millones en 2026
El creciente abismo entre los conductores que se jubilan y los nuevos conductores va a triplicar la tasa de puestos de trabajo de conductores de camiones sin cubrir, hasta más del 60% en 2026, y se multiplicará por más de cinco en el caso de los conductores de autobuses y autocares, hasta casi el 50% en 2026.
El nuevo informe evalúa seis países que representan dos tercios del total del sector del transporte de mercancías por carretera en Europa, y cuatro países para el transporte de pasajeros, que representan el 28% del total. Si no se toman medidas para que la profesión de conductor sea más accesible y atractiva, Europa podría carecer de más de dos millones de conductores en 2026, lo que afectaría a la mitad de los movimientos de mercancías y a millones de viajes de pasajeros.
A pesar de que los salarios de los conductores son hasta cinco veces superiores a los salarios mínimos medios, el informe expone datos alarmantes sobre las dificultades de acceso a la profesión de conductor, especialmente para los jóvenes, y su atractivo, sobre todo para las mujeres.
El Secretario General de la IRU, Umberto de Pretto, declaró: "La crisis de escasez de conductores en Europa se está acelerando rápidamente, lo que supone una gran amenaza para el continente si no se hace nada. "Los camiones transportan el 75% de la carga de Europa en volumen, y el 85% de sus productos perecederos, de alto valor y médicos, como vacunas y alimentos. Los servicios de autobús y autocar, el modo de transporte colectivo más utilizado en la UE, son fundamentales para los objetivos de descarbonización de Europa."
Faltan mujeres y jóvenes
La proporción de jóvenes conductores es baja (6% en el transporte de mercancías y 5% en el de pasajeros), a pesar de los buenos salarios de los conductores y el alto desempleo juvenil persistente en muchos países.
Las mujeres también representan sólo un pequeño porcentaje de conductores de camiones, a pesar de los importantes niveles de desempleo femenino en algunos países. España, por ejemplo, tiene una de las tasas de desempleo femenino más altas de Europa (14%), pero uno de los porcentajes más bajos de conductoras de camiones (2%), en contraste con las conductoras de autobuses y autocares (12%).
El acceso y el atractivo son claves
La edad mínima de cualificación sigue siendo de 21 años para los conductores de camiones en cinco países de la UE y de entre 21 y 24 años para la mayoría de las funciones de conductor de autobús y autocar en toda la UE, lo que supone una enorme barrera para los que abandonan los estudios.
Los elevados costes de la licencia y la formación también son un obstáculo. En Francia, el carnet de camión cuesta 5.300 euros, más de tres veces el salario mínimo mensual medio, mientras que en Alemania, el carnet de autobús y autocar cuesta 9.000 euros de media, más de cuatro veces el salario mínimo mensual. La seguridad, sobre todo para las mujeres conductoras, es crucial para hacer más atractiva la profesión, ya que el 95% de los camioneros y el 94% de las empresas de transporte la sitúan como su máxima prioridad. Sin embargo, sólo el 3% de las plazas de aparcamiento de camiones existentes en la UE están certificadas como seguras.
Soluciones sobre la mesa
Los sectores público y privado deben colaborar para solucionar la escasez de conductores. El informe expone 20 soluciones que están aplicando actualmente las asociaciones de transporte por carretera, las empresas y los transportistas.
Las autoridades públicas también deben tomar medidas para evitar que la escasez se agrave, entre ellas:
- Fijar la edad mínima para conducir en 18 años, con formación a partir de los 17
- Subvencionar los costes del permiso y la formación de los nuevos conductores
- Construir zonas de aparcamiento más seguras
