La investigación, financiada por el Ministerio de Medio Ambiente, forma parte del Proyecto Miveco, que pretende establecer cuál es el consumo y contaminación de un vehículo en el trafico real y la incidencia de una conducción ecológica en el consumo. Las pruebas se han realizado en tráfico urbano real y con el primer todoterreno del mercado dotado con el sistema "Stop and Start" y además sobre un motor diesel, el Freelander 2 de Land Rover. El sistema apaga el motor durante las paradas, por ejemplo ante un semáforo, al soltar el pedal del embrague y llevar la palanca de cambio a punto muerto.