"Francia es un mercado tremendamente exigente, no tanto por sus condiciones climáticas como por ser un mercado maduro, que requiere la excelencia en el servicio y la red de posventa", comenta Mariame Aghbalou, responsable del mercado, que añade "en esta época de crisis y limitación de recursos económicos nuestra apuesta por el servicio y la posventa, sintetiza la estrategia a seguir para el futuro de nuestra competitividad".
Desde el comienzo de sus operaciones en el país vecino, la empresa, especializada en climatización de vehículos de transporte de pasajeros, ha vendido más de 2.000 unidades que están funcionando a pleno rendimiento por las carreteras francesas.