Además, España es el primer fabricante de vehículos industriales de la Unión Europea, según Anfac. El arraigo y compromiso de esta industria en España es evidente, sirviendo de motor de arrastre para otros muchos sectores industriales. Y es una industria preparada para canalizar el crecimiento y la recuperación del país.
Por ello, es imprescindible que se continúe mejorando y avanzando en todos aquellos aspectos relacionados con la competitividad industrial, que resultan fundamentales para apuntalar los cimientos de una industria que supone el 10% del PIB y el 20% de las exportaciones totales del país y emplea a cerca de dos millones de personas.