Esto causa un grave problema a aquellas personas que están visualmente impedidas o con problemas de vista, por lo que han exigido que la Comisión Europea actúe en este asunto. Sin embargo, la comisaria europea de justicia, Viviane Reading, les ha respondido recordando que la regulación del espacio físico para los anuncios, incluido el transporte público, compete exclusivamente a las autoridades locales y nacionales, por lo que queda fuera del ámbito de las competencias de la UE. La comisaria también ha señalado que la UE no dispone de datos sobre esta práctica en los Estados miembros ni los efectos que la misma pueda tener en ciertos grupos sociales. No obstante, Reading sí que reconoce que la práctica puede provocar barreras para los usuarios del transporte público y especialmente los impedidos visualmente.